viernes, 7 de noviembre de 2008

Anécdota

... 2, 3, 4.

Hablar desde el error, sin la opción a vanagloriarse perdidamente de la solución que disfrutaríamos, si el consejo se hubiese seguido. Ahora se aprecia lo antes visto ligero y seguro, nunca hubo apuros, por lo mismo ahora más que nunca es futuro. Solo déjame agradecerte eso que haces al ser elocuente, simplemente diferente, con quien no lo merece. Pero aprenderlo de otra forma hubiese sido optimismo, a un camino lleno de desvíos.

Que saben de AMISTAD, cuando hay amor y una práctica fallida de maldad. Nadie sabe en realidad, menos yo, más puedo procurar tratar de no caer ante la banalidad. A mano estamos, no se altero el resultado, si aumento el despilfarro, pero bueno, con algo nos quedamos y ahora bien estamos.
Y vamos que la vida es larga en su brevedad y hay muchas cosas por las que pasar y en algún momento parar a pensar. Eventualmente hablar.
Que sé de tener amigos, aprendizaje instintivo, es algo tan continuo y del egoísmo salen cinismos que van acumulando delirios que terminan en...
Solo ahora se sabe que capaces de todo somos, que molestarse es una perdida del poco tiempo que tenemos, pero pedir perdón, no sólo disculpar la acción, es lo que hago con costoso valor, para una de las personas que ocupan el corazón.

Ceder es comprender, con humildad y desinterés.

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